sábado, 12 de febrero de 2011

Cicatrices

Esa fue una mini reproduccion de mi vida, mi familia, etc... Ahora vamos a mi, a que me conoscan mas. La ausencia de mi padre y mi tio fueron dos cosas que me afectaron mucho, demaciado. Después de que mis viejos se casaran nos fuimos a vivir a capital, pero solo duró un año. Un año bastante duro, lejos de mis abuelos, mis tias, mis primos. Empezaba primer grado de la primaria, me mandaban a un colegio jornada completa, a mi y a Daro. Fue un año de muchos cambios en mi vida.. Ese año lloraba cada noche escuchando un tema de Rata Blanca. Lloraba con dolor y en silencio, cantando e identificandome con la letra, lloraba extrañando a mis primos que tanto les gustaba ese tema, lloraba extrañando las comidas de mi abuela, a sus regaños, lloraba extrañando los ruidos, mis travesuras, lloraba extrañando a mi angel, lloraba el cambio. Lloraba. Hay cosas en mi vida pasada que no recuerdo mucho, o prefiero no recordar.
Después de vivir en capital nos volvimos a vivir en Avellaneda, con la exepcion de Dario que se fue a vivir con su madre. Volviendo, y unos añitos despues por alla en el 2002 llego mi gran compania, mi hermana. Florencia. Era una bebé hermosa, unos ojitos grises, rubiecita y bien gordita. Yo estaba enbobada con ella y con mis otras primitas bebés, Mily y Ailin. Mi hermanita fué creciendo y yo tambien. Y ahi comenzaron los primeros daños de mi vida, daños sin intencion, pero que nose si algún dia llegue a olvidar.
Yo a Leo lo quiero mucho, y en ese tiempo tambien lo queria, pero empezaba a molestarme sus constantes malhumores, hasta eh deseado que se alejara de mi familia, deseaba volver a ser solamente mi mamá y yo. Pero todo era distinto, ya estaba Flor. En aquellos tiempos a mi mamá le irritaba mucho el malhumor de Leo, y ahi empezaron a chocar y peor que eso, las peleas. Las discuciones, las subidas de tono. Los platos, vasos y cosas rotas empezaban a escucharse. Mi hermanita era chiquita, asi que cuando pasaba eso se asustaba y lloraba, entonces yo la alzaba a upa, nos encerrabamos en la pieza y me aferraba a ella y juntas llorabamos, aunque yo intentaba que ella se calmara.. Nos quedabamos ahi solitas hasta que parara la discucion. Esos talvez fueron varios de los momentos mas tristes y desesperantes de mi vida. Ver y escuchar esas peleas sin poder hacer nada. Ya empezaba a acostumbrarme a esas peleas, aunque yo no participara nose porque razon siempre era el detonante de la pelea. Leo nunca me pegó, jamás lo hizo, pero aún asi, siempre se la agarro conmigo cuando estaba de malhumor. La causa de las peleas en mi familia siempre tenian que ver conmigo, o aveces. Todo empezaba por algo que yo hacia o por algo que Leo decia de mi, aveces decia cosas feas, irientes porque yo nunca me quedaba callada y menos cuando algo no era justo, el siempre queria tener la razon, por eso varias veces me calle, esos silencios me condenaron.
Cuando empezé a acostumbrarme a las peleas, a consolar mas a mi hermanita, y a llorar menos, hubo una pelea que marcó mi vida. Porque en esa no estaba encerrada en la pieza, estaba ahi con mi hermana en brazos viendola en vivo y en directo. Después de gritos e insultos, mi mamá y Leo empezaron con la violencia. Era horrible ver a mi mama pegandole y el agarrandola del cuello y frenando sus golpes, era horrible tener que ser fuerte y controlar las ganas de llorar y ver a mi mamá con un ataque de nervios, era horrible ver a el ser que mas amo desmayarse sin reaccionar.
Fui a la casa de mi abuela, que era al lado de mi casa, y vi a mi tia. Cuando me pregunto que pasaba no pude contener las lagrimas y al borde del llanto le dije "Mi mama!" mientras tenia a mi hermanita. Mi tia salió a ver que pasaba y yo entre a la casa de mi abuela, me fui al comedor dejé a mi hermanita arriba de la mesa que aun lloraba y fui a la especie de santuario que tenian de mi tio. "Tio, por favor, que terminen de pelear, que no le pase nada a mi mama por favor, ayudame" mientras trataba de calmarme y dejar de llorar. Ese momento de violencia marcó mi vida, pero después de ahi las peleas ya no eran tan constantes, aunque en mi, los recuerdos de esa pesadilla ya estaban instalados. No creo que hayan sido con intension ni mucho menos. Entiendo que no existe la familia perfecta, y a pesar de los daños que me ocacionaron los perdono. Los perdono porque se que no era intencionalmente, los perdono porque son dos grandes personas que se desviven por mi hermana y por mi. Los perdono pero aun asi el dolor no se va jamas, la angustia y la impotencia no se van. La impotencia de no poder hacer nada. La impotencia de que mi hermanita haya tenido que soportar cosas tan duras cuando era solo un bebé. Juro que daria todo porque ella jamas huviera presenciado eso, daria todo, pero al igual que yo. Ella ya esta marcada y ojala pueda olvidar, ojala.

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